ACROYOGA

Desde hace años profesores de diferentes partes del mundo han practicado la fusión
de técnicas terapéuticas y circenses. Con el tiempo esta mezcla ha sido investigada más
profundamente dando origen al yoga aéreo (años 30) y más tarde al acroyoga, que nace de
la mezcla entre el yoga, las acrobacias de suelo y el masaje tailandés.

Hoy en día el acroyoga se puede definir como una práctica corporal que busca el equilibrio entre mente y cuerpo a través de actividades aeróbicas y de relajación. En algunos casos también se
añaden a la práctica performances, creatividad, danza, entre otras varias disciplinas.

Aparte de la diversión y el proceso de cura proporcionados por el acroyoga, también
se pueden percibir diversos beneficios físicos, mentales y emocionales al realizar la
práctica. Este nuevo arte llama la atención de muchas personas por todo el mundo, pues es
ideal para aquellos que desean mejorar el equilibrio y la autoestima, ganar fuerza y
aumentar la flexibilidad de los músculos, evitando dolores y proporcionando mejor bienestar.

El acroyoga puede ser practicado por cualquier persona y a cualquier edad, sin
necesariamente saber sobre yoga, acrobacias o masaje. Las posturas encajan con los
diferentes biotipos y a la hora de jugar y aprender cada uno elige su rol y utiliza la técnica
para realizar figuras estáticas, flows, washing machines y/o posturas terapéuticas.

Dependiendo del país o región la parte más acrobática o activa del acroyoga se
conoce como solar y puede tratarse de una simple transición entre una asana y otra o
también se puede realizar una serie de movimientos fluidos. Algunos beneficios del
acroyoga solar son el aumento de la concentración y el equilibrio, el desarrollo de la
empatía y del trabajo en equipo, además de estimular la producción de endorfinas –
sustancias químicas naturales responsables por la felicidad y el bienestar.

En el caso delacroyoga lunar se trata de conexión más terapéutica entre base (el que realiza el masaje) y volador (el que recibe el masaje) a través de movimientos suaves proporcionando relajación mental y física, mejora de la circulación sanguínea, reducción del estrés y aumento de la confianza y la escucha.

Hoy en día el acroyoga es bastante conocido y practicado en todo el mundo. Se
mezcla con otras disciplinas como icarios, pops, whips, standing, portes dinámicos entre otros. En todas ellas suele haber tres roles llamados de diferentes formas dependiendo del  espacio de entreno: base o portor(a), volador(a) o ágil y cuidador(a) o spotter.

Los tres roles tienen su importancia, siendo considerado por muchos el spotter el más importante dentro de la comunidad ya que habiendo buenos cuidadores el grupo se atreve a realizar o proponer trucos más complicados y en seguridad. Además de cuidar, el spotter corrige las posturas generando estabilidad entre los movimientos ejecutados y comunica con el base y volador para que todo sea practicado en seguridad. El o la volador(a) es la persona que será sujetada por la base y el o la base se dedica a portar al volador(a). Estos tres roles se convierten en una simbiosis con el objetivo de jugar y/o realizar transiciones dependiendo del grupo. Es importante escuchar al cuerpo, la respiración y el tiempo de todos los componentes del equipo.

A través del acroyoga se aprende a escuchar a los que tienes alrededor, a confiar, a respirar, a coordinarse con el otro y sobre todo pasárselo bien en compañía de más personas, ayudando a mejorar las habilidades sociales.

Texto e imagen por Liberdanza Madrid. https://liberdanzamadrid.com

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