En este post seguimos comentando (ver Parte 1) diversos aspectos del aprendizaje de los hobbies y damos algunas referencias.

Cuando se estudia la enseñanza obligatoria o para un oficio o profesión, en general existen unas exigencias, unas fechas, unas penalizaciones(suspensos) que pueden hacer de dicho estudio algo estresante o poco agradable.  En teoría,  con el aprendizaje de un hobby esto no debería ocurrir ya que no existe obligatoriedad.  Es decir, el aprendizaje de un hobby debe ser agradable, estimulante o incluso divertido.  Si no es así es que algo falla, o el profesor o el alumno y habría que revisarlo.

Por otro lado, en los hobbies no todo siempre es divertido, emocionante o relajante. Como toda actividad puede tener algún aspecto negativo que hay que conocer y asumir. Si, por ejemplo, se quiere aprender a tocar el piano, es razonable que haya que aprender algo de solfeo. Este aprendizaje básico puede parecer árido y sin relación con lo que uno desea y entonces hay que asumir, como cuando uno aprende para luego trabajar, que el fin justifica los medios y que hay que sacrificarse algo para luego pasárselo bien. La ventaja que hay es que si lo desagradable es excesivo no pasa nada grave por abandonar, excepto quizá un gasto inútil de dinero y de tiempo y una posible frustración y desanimo que habría que superar fácilmente.

No obstante, por estas razones y para evitar el fracaso hobbystico , es por lo que hay que intentar elegir bien lo que uno desea, al igual que ocurre en la vida laboral.  En este sentido es interesante, antes de elegir el hobby o de empezar a aprenderlo, conocer la duración y niveles de dificultad de dicho aprendizaje.

En relación con lo anterior hay que señalar el especial papel que juegan padres y educadores cuando se trata de niños o jóvenes.  En estos casos cae sobre ellos la responsabilidad de deducir qué puede ser más conveniente para el niño, teniendo en cuenta que un buen hobby puede ser algo muy útil para toda la vida.  Y de elegir adecuadamente la forma de aprendizaje.

Puede ocurrir algo parecido con terapeutas que decidan por personas con limitaciones o con familiares o encargados de mayores con deterioro que no puedan decidir bien por si mismos.

En conclusión, los principales puntos a tener en cuenta al plantearse el aprendizaje de un hobby son: 

1-El aprendizaje de un hobby debe ser placentero y agradable, aunque puede haber momentos frustrantes. 

2-Hay que plantearse una meta realista y elegir entre un aprendizaje básico, nivel medio o avanzado.

3-Conviene conocer, antes de comenzar,  la duración, dificultades y gasto del aprendizaje del hobby que nos interesa.

4-Los padres y educadores juegan un papel importante en el aprendizaje de niños y jóvenes.

  

Referencias

 

 

 

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