En este post reproducimos el iluminador texto de una entusiasta de la lectura como afición.
Podría caer en mil y un tópicos que suenan muy bien y decir que me encanta leer porque es una forma de viajar y conocer otros mundos, porque así me enriquezco y puedo comprender mejor la realidad que me rodea y la que no, porque me permite conocerme y buscarme a mí misma, porque me consuela y me evade en los momentos tristes y me acompaña en los momentos solitarios… pero, si es verdad que leo por todas esas razones, no lo sé.
Yo leo porque me entretiene y quizá porque soy una persona cotilla, no curiosa , y me gusta saber qué historia hay debajo de cada título que me llama la atención, si la historia en sí misma y cómo está escrita me enganchan, me entretienen y me hacen adentrarme tanto en el libro como para poder poner imágenes a las palabras y olvidarme de una realidad que no ansío olvidar cuando empiezo a leer.
Me gusta leer porque es una actividad que no requiere a nadie, salvo la soledad .
A veces puede que también me guste leer por justamente lo contrario, para conectar con los demás, es el caso de las lecturas recomendadas, aunque siempre subyace ese carácter cotilla que hay en mí, saber por qué una lectura les gustó tanto a otras personas.
Quizá me gusta leer por costumbre, porque me empezó a gustar desde pequeña, desde que iba a la biblioteca y hojeaba las páginas de los cómics y de los libros o porque me gustaba el libro como objeto, su textura, su olor… Es algo mágico. Un libro (nuevo o usado) es un tesoro desde cualquier punto de vista. Por eso creo que nunca dejaré de lado el libro de papel aunque la lectura de libros electrónicos pueda resultar más cómoda.
En definitiva, la respuesta más sincera es que no sé por qué leo, me gusta leer por los mismos motivos que me gustan los caquis, las mandarinas, dar un paseo, estudiar italiano o ver una película o una serie.
Eleni